¿DISEÑAR POR HACER O DISEÑAR PARA HABITAR?
Empezare con una simple frase “La arquitectura moderna no significa el uso de nuevos materiales, si no utilizar los materiales de una forma más humana” de Alvar Aalto.
En la cultura contemporánea encontramos propuestas de arquitectura de diferentes estilos y dinámicas, sin embargo cuando los arquitectos proponen dejar su imagen por delante con una fachada “bonita”, y no resuelven cuestiones de habitabilidad si no de formalidad, conlleva a que la arquitectura trascienda al estilo “fashionista”, perdiendo los principios de finalidad de un Arquitectico de satisfacer las necesidades del que lo habita.
Esta crítica pasiva, quiere lograr de alguna manera quitar esa ideología de “el todo vale” si no ir más allá de lo que vemos, a parte de un título de Arquitecto hay una persona detrás, y como tal un ser racional, que es de las principales características que nos distingue de un animal, así que porque no hacer un alto, y pensar mejor las cosas.
Lograr generar una articulación de la realidad que se está viviendo, que una edificación trascienda lo metafísico con lo físico, y que como Arquitectos significa dejar una pieza que va a dejar un legado físico y tangible, así que vale la pena colocarnos ese juicio personal, social, ético e ideológico.